Administrar el tiempo, ya sea para trabajar, hacer ejercicio, realizar tareas domésticas o simplemente darte un tiempo para ti,en esta época que permanecemos en casa, puede llegar a ser complicado, pero es necesario para ser más eficiente.

La luz, resulta una gran oportunidad para mejorar tus hábitos y una herramienta que puede ayudarte a lograrlo. Aunque no lo creas, la iluminación está implícita en todas tus actividades y puede avisarte con un cambio de color o intensidad que es momento de levantarte, tomar agua, motivarte cuando estás haciendo ejercicio, concentrarte más, etcétera.
Pon una alarma para despertar siempre a la misma hora: Recuerda que no son vacaciones y que es importante despertarte en un horario establecido, para que luego no te cueste tanto trabajo al momento de regresar a la normalidad.
Un estudio publicado en “ScientificReports” reveló que las personas con horarios de sueño irregular son más propensas a sufrir depresión y estrés que aquellas que tienen patrones regulares de sueño. Puedes usar desde una baja iluminación hasta una creciente intensa que, seguro, te ayudará a activarte.

Ejercítate y mantente activo: Hacer ejercicio físico es bueno para despejarse y comenzar el día con mayor energía, motivado y reducir cualquier tensión.
Actualmente, existen un sinfín de opciones disponibles en Internet, como: clases de yoga, baile, zumba, entre otras. Búscala que más te guste y ponte un objetivo semanal, acompaña tu clase con una luz blanca para sentirte más activo, o con tu color favorito para disfrutar más.

Destina un lugar para trabajar: Lo más importante es que no tengas distracciones y termines tus actividades dentro de la jornada laboral. Revisa la iluminación que tienes en este espacio; te recomendamos luces frías, pues te permiten estar más concentrado y evitas una posible fatiga visual. Además, prioriza tus tareas y respeta tus horarios para estirarte un momento, comer a tus horas y terminar como si estuvieras en la oficina.

Relajarse también es importante: Este momento es esencial para concluir el día con broche de oro, sentirte bien y dar lo mejor al día siguiente.
Haz eso que tanto te gusta, por ejemplo: disfrutar de tu peli o serie favorita, leer, una buena plática, cocinar o tomar una siesta, todo se vale.

Crea rutinas y cumple tus horarios establecidos diariamente. Programa tus luces y haz que los cambios de color o intensidad, te indiquen que es momento de hacer otra cosa. Experimenta con la luz y descubre cómo se vuelve un aliado importante en tus actividades en casa.

