Conoce la importancia de disfrutar de una buena salud mental y algunos factores que indican si deberías recibir algún tratamiento médico.
La salud mental es un estado de bienestar que permite a las personas hacer frente al estrés de la vida, desarrollar todas sus habilidades, aprender y trabajar adecuadamente, y contribuir a su comunidad, según la OMS.
Es considerada un derecho humano fundamental y es primordial para el desarrollo personal, comunitario y socioeconómico.
Los trastornos mentales y discapacidades psicosociales, así como otros estados mentales asociados con un alto grado de angustia, discapacidad funcional o riesgo de conducta autolesiva, se consideran alteraciones de la salud mental.
Recomendación: Goza de un estilo de vida saludable en la oficina siguiendo estos consejos
¿Cómo saber si NO tengo una buena salud mental?
- Si un estado emocional displacentero deja de ser momentáneo y se torna recurrente.
- Si se dificulta significativamente realizar tus actividades cotidianas.
- Si se alteran los ritmos biológicos como el sueño y el apetito.
- Si empiezas a tener pensamientos de tendencia suicida.
¿Cómo cuidar mi salud mental?
Siente tus emociones, no las reprimas: Todas las emociones son necesarias; no hay emociones buenas ni malas. Al sentir y aceptar tus emociones, fluirán y comenzarás a sentirte mejor.
Mantén un estilo de vida saludable: Aliméntate balanceadamente, hidrátate regularmente, haz ejercicio por lo menos tres veces a la semana y duerme lo suficiente.
Enfócate en ti: Inscríbete en ese curso que hace mucho quieres tomar o practica ese hobby que tanto te gusta. Intenta realizar actividades interactivas y recreativas donde también puedas conocer nuevas personas.
Reconoce cuándo necesitas ayuda: Mantén cerca tus redes de apoyo y comunícate con ellas.
Prioriza tu bienestar, cultiva relaciones de afecto.