Liam Payne, exintegrante de la exitosa banda One Direction, fue despedido por familiares, amigos cercanos y sus antiguos compañeros de grupo en una ceremonia privada celebrada en la iglesia de St Mary’s, en Amersham, al oeste de Londres.
El cantante falleció el pasado 16 de octubre en Buenos Aires a los 31 años, dejando tras de sí un legado musical significativo y una oleada de tributos de sus seguidores en todo el mundo.
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Así fue la ceremonia para despedir a Liam Payne
El funeral, que se mantuvo en estricta privacidad hasta su anuncio, contó con la presencia de los exintegrantes de One Direction: Harry Styles, Zayn Malik, Niall Horan y Louis Tomlinson.
Todos se reunieron para rendir homenaje a su amigo y compañero de banda en una iglesia decorada con flores y velas.
El cortejo fúnebre incluyó el féretro del cantante, transportado en un coche blanco y acompañado por sus padres.
También asistieron figuras importantes en la vida personal de Payne, como su expareja, Cheryl Tweedy, madre de su hijo Bear, de nueve años, y su última novia, la influencer Kate Cassidy.
Un grupo reducido de fanáticos se congregó detrás de un cordón de seguridad para despedirse del artista.
La muerte de Liam Payne conmocionó tanto a sus compañeros como a sus admiradores, quienes organizaron múltiples homenajes alrededor del mundo.
En Londres, más de mil personas se reunieron frente a la estatua de Peter Pan en Hyde Park, dejando flores, cartas y fotografías en su memoria.
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La vida del exintegrante de One Direction
La carrera de Liam Payne inició en 2010 cuando One Direction se formó durante el programa de talentos británico The X Factor.
Con el grupo, alcanzó un éxito global, lanzando cinco álbumes de estudio y convirtiéndose en una de las boy bands más exitosas de la década.
Sin embargo, Payne enfrentó desafíos significativos fuera de los escenarios.
El cantante habló públicamente sobre sus problemas con el abuso de sustancias y las dificultades para manejar la fama desde joven.
En un video de 2023, admitió haber ingresado a un centro de rehabilitación debido a su alcoholismo.
“Me convertí en alguien que no reconocía, y estoy seguro de que tú tampoco lo reconocías”.
Confesó entonces.
Según el informe de la autopsia, Payne murió debido a “múltiples traumatismos” y “hemorragias internas y externas” tras caer desde el tercer piso de un hotel en Buenos Aires.
Las investigaciones revelaron que había consumido alcohol, cocaína y antidepresivos antes de su muerte.
La justicia argentina imputó a tres personas en relación con el caso: su acompañante, acusado de abandono de persona seguido de muerte y suministro de sustancias, un empleado del hotel que suministró cocaína y un proveedor externo.
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