Murió a los 74 años, tras combatir una grave enfermedad; era el CEO de la compañía fabricante de lápices de colores.
El empresario de ocho generaciones de la familia, Conde Anton-Wolfgang von Faber-Castell murió después de una grave enfermedad, el jueves 21 de enero rodeado de su familia en Houston, Estados Unidos. Tenía 74 años.
Al Conde le sobreviven su esposa Mary y cuatro hijos adultos. Bajo su liderazgo, que duró casi 40 años, la compañía Faber-Castell a nivel global ha avanzado para convertirse en una marca Premium internacional, así como uno de los productores líderes en lápices cosméticos. Hasta sus últimos momentos, su trabajo y su pasión estuvieron dirigidos a su familia, a la empresa y a sus empleados.
El management y el personal de la empresa se manifestaron de luto por la pérdida del empresario modelo, a quien tanto admiramos como extraordinario emprendedor y como una personalidad con visión de futuro, y que, sobre todo, era un modelo a seguir como ser humano.
La empresa Faber-Castell Fundada en 1761, Faber-Castell pertenece a una de las empresas industriales más antiguas de todo el mundo, que lleva ocho generaciones en manos de la misma familia.
Hoy en día cuentan con representación en más de 120 países y tienen 16 plantas de producción y 19 sociedades distribuidoras en todo el mundo. Faber-Castell es una de las empresas líderes a escala internacional respecto a productos de alta calidad para escribir, dibujar y diseñar de forma creativa, así como uno de los fabricantes más importante.