Selena Quintanilla fue una de las cantantes que rompieron esquemas en su época, logrando consolidarse en una industria que era dominada por hombres. Esto sigue marcando a nuevas generaciones que además de disfrutar su música, se inspiran en su legado.
Para muestra de la importancia de Selena en las nuevas generaciones tenemos el ejemplo de la hija de Lily Martínez, que decidió celebrar su cumpleaños siendo la reina del Tex Mex.
La decoración estuvo inspirada en las canciones de Selena, desde el pastel, las mesas y los adornos.
Para hacer el evento aún más emocionante, la pequeña decidió no uno sino tres vestuarios, una fue el ya conocido palazzo morado, otro la falda floreada que usó en el video de Bidi Bidi Bom Bom, y un vestido negro.