Con un simbólico Bar Mitzva y bailes mexicanos, el Festival Internacional de cine judío en México, celebró su 13ª edición en Cinépolis Plaza Carso.

La intención fue presentar el especial vínculo que el el pueblo judío tiene con México, al tener ya varias generaciones de mexicanos judíos que vivien con orgullo en el país.

Al evento, asistió el embajador de Israel, Jonathan Peled, el cual señaló que este tipo de eventos culturales refuerzan aún más los lazos entre ambos países, mostrando la riqueza y coincidencias que engloban ambas culturas. Así mismo, David Grossman, uno de los escritores de los filmes a presentar (Nono, el niño detective), expresó que espera que al ver las películas, el público pueda compartir el sentimiento complejo, intenso y lleno de contradicciones de lo que significa ser hoy israelí.